La relación entre un hombre de signo Cáncer y una mujer Sagitario puede, sin lugar a dudas, ser tempestuosa. Sus impulsos son prácticamente contrarios y sus cualidades más contrapuestas que complementarias. No obstante, el conocimiento de los Astros ha sido determinante en estos casos, dado que un conocimiento profundo acerca de las cualidades, fortalezas y debilidades de ambos signos puede ser la clave para sacar a flote incluso la relación menos prometedora en términos de compatibilidad. De momento solo diremos que Sagitario es un signo muy móvil, mientras que Cáncer, por su parte, es un signo muy estable y sedentario.
El hombre Cáncer suele tener problemas de convivencia con la mujer Sagitario precisamente porque él adora lo seguro y predecible mientras que ella vive por la emoción, la libertad, sin detenerse en compromisos o ataduras. Si algo caracteriza a Cáncer es, por supuesto, su devoción hacia la pareja, pero tal devoción no es bien asimilada por Sagitario quien, a diferencia de Leo (por poner un ejemplo) no goza de la adulación, sino que la suele relacionar con una dependencia que no va con su estilo. Es importante, no obstante, repetir que este abismo existente entre los Cáncer y los Sagitario no es insalvable. Entre ellos hay algunas líneas bien definidas que pueden servir para construir un puente entre ambos tipos de carácter tan disímiles.
Compatibilidad general entre ambos signos
Para entender la compatibilidad básica entre Sagitario y Cáncer hay que partir de la naturaleza de ambos signos. En primer lugar, Sagitario es un signo de fuego que si bien es dominante y enérgico, no goza tan bien la adulación como su compañero Leo. Cáncer, por su parte, es el signo protector y devoto por excelencia. Su característica principal al hablar de relaciones no es otra que el apego, el aferramiento hacia los seres queridos. Esto en primera instancia no satisface realmente a Sagitario, porque siempre está buscando nuevas experiencias, nuevas emociones. Sagitario no suele hallar tranquilidad en los hogares cálidos y apacibles dado que necesita saciar su espíritu aventurero ante cualquier otra cosa o tarea. Esto resulta inaceptable para el hombre Cáncer quien, siendo mucho más conservador y tradicional, prefiere la seguridad en todos los aspectos de su vida (laboral, sentimental, personal) en vez de las arriesgadas aventuras que apasionan a las Sagitario. Sus intereses se nos revelan como totalmente opuestos y, sin embargo, esto también puede significar algo positivo puesto que en las oposiciones se identifican fortalezas y debilidades haciendo que las relaciones entre estos signos puedan ser entendidos como grandes desafíos para el crecimiento individual de los involucrados.
Para que una relación entre Sagitario y Cáncer funcione es necesario que ambos reconozcan sus cualidades centrales, de lo contrario, entre ambos se presentarán conflictos constantes que llevarán primero a graves discusiones y luego a la ruptura de la relación, bien sea que se trate de una amistad o de una relación sentimental amorosa. Como Sagitario es muy dinámica y con un sentido práctico de la vida, choca con la sensibilidad, mística y emocionalidad del hombre Cáncer. Este se caracteriza porque lo central en su vida es lo emocional-afectivo. Cáncer no piensa mucho en términos pragmáticos y (como suele decirse) en términos racionales. Además, Cáncer también es propenso a cambios fugaces de humor (lo cual se relaciona con la preponderancia de lo emocional en su vida y con la dificultad que posee para manejar tales emociones), lo cual puede propiciar discusiones respecto a las acciones y perspectivas de Sagitario, quien no se satisface con rutinas, planes y predeterminaciones para su estilo de vida.
No obstante, como punto a favor hay que mencionar la complementariedad de Cáncer respecto al balance existente entre los cambios y lo repetitivo. Cáncer puede hallar en Sagitario un motivo para experimentar cosas nuevas y tomar oportunidades que impliquen cierto riesgo y, a su vez, Cáncer puede aportarle a Sagitario cierta estructura y continuidad en la realización de sus planes, pueden ilustrarla, por lo tanto, respecto a las ventajas que presenta el balance entre la planificación y la libertad.
La compatibilidad en el amor y las relaciones de amistad
Al hablar de relaciones interpersonales, hay diferencias esenciales entre el hombre Cáncer y la mujer Sagitario. El primero es amable pero reservado, la segunda es extrovertida y receptiva. A Cáncer no le importa atender las necesidades de muchas personas, bien sea en el hogar o el ambiente de trabajo, y por ello hace amigos con cierta facilidad, pero ello no significa que considere a todos sus amigos de forma rápida y unívoca. La mujer Sagitario es, en este aspecto, mucho más liberal y receptiva. Su espontaneidad la lleva a conectar con muchas personas pero, a su vez, no tiene filtro con ellas, siendo mucho menos distante que Cáncer al momento de entablar relaciones más complejas. En este sentido, cabe decir que Sagitario no se toma la misma cantidad de tiempo que Cáncer para juzgar si una persona debe estar en su vida o no.
A pesar de esta facilidad con que Sagitario conforma lazos, no los rompe con facilidad. En ese aspecto coincide a la perfección con los Cáncer. Una mujer Sagitario solo renunciará a una relación significativa con los hombres Cáncer si estos de verdad tienen aspectos que son muy contrarios a su naturaleza y a su libertad. En estos casos, en los cuales los hombres Cáncer son muy restrictivos y co-dependientes, ni la amistad ni el amor podrán florecer sencillamente porque Sagitario no puede expresarse como verdaderamente es.
Para que una relación entre una mujer Sagitario y un hombre Cáncer prospere, estos tendrán que ceder ante ciertas exigencias de su contraparte. No obstante, de antemano puede afirmarse que es Cáncer quien debe hacer un mayor esfuerzo (cosa que no significa que Sagitario por ello le deba todo) puesto que es quien más debe luchar con sus inseguridades y necesidades afectivas para que así Sagitario pueda ser con libertad tal como lo es con cualquiera de sus amistades y familiares. Cáncer es un signo que posee un amor es intenso, pero precisamente por ello también tiende a ser posesivo. Si el hombre Cáncer logra reconocer y trabajar sobre este aspecto de su personalidad, podrá ser merecedor del amor incondicional de una Sagitario.
La conquista no será algo particularmente difícil, porque si bien Cáncer es tímido, también es muy tenaz. Cuando Cáncer se propone un objetivo, no se detiene hasta conseguirlo, y es precisamente ese empuje y determinación lo que cautiva a las mujeres Sagitario. Su romanticismo será el gancho ideal para su espíritu práctico y material. La mística de Cáncer en su vida cotidiana es aquello de lo cual carece la personalidad de la mujer Sagitario y por ello le suele parecer tan atractivo.
Siempre que Cáncer logre reconocer los límites y la libertad individual de su pareja, esta relación no tiene por qué estar destinada al fracaso tal como parecía en un comienzo. Tanto Cáncer como Sagitario se complementan (aunque en principio parecen tener cualidades incongruentes) en la vida cotidiana, en las relaciones de trabajo y, por supuesto, en la vida sexual. La mujer Sagitario también ha de hacer algunos sacrificios para acostumbrarse a la tendencia hogareña de Cáncer, pero si ambos logran afrontar las pruebas, podrán disfrutar de una buena y duradera relación.
La compatibilidad en el trabajo o en aspectos profesionales
Los hombres Cáncer y las mujeres Sagitario son los que popularmente se conocen como workaholics o adictos al trabajo. La diferencia está en que ambos los mueven motivos distintos. A la mujer Sagitario y a las personas de este signo en general, los mueve el desafío. Incluso puede distinguirse que no es la competencia (razón por la cual no tienden al conflicto y las rivalidades), sino el hecho de superar una meta marcada. Los Sagitario son determinados (al igual que los Cáncer) y su más grande satisfacción radica en ver cumplidos los objetivos marcados. Sagitario no tiene tiempo para discutir, necesita ante todo solucionar.
Es en ese punto donde Cáncer es estupendo. Cáncer siempre construye y apoya, no le interesa brillar particularmente, tal como sucedería con Leo. El hombre Cáncer es servicial y también es un adicto al trabajo porque adora ayudar a los demás (allí radica su motor y diferencia con Sagitario). A Cáncer le interesa más aportar su grano de arena para que las metas sean cumplidas y para colaborar con su compañero. En este sentido, un hombre Cáncer es el perfecto soporte para las mujeres Sagitario que ocupan cargos directrices en ambientes laborales, oficinas, empresas y directoras de proyectos. Ninguno de los dos es particularmente conflictivo. Tan solo Cáncer puede ser muy susceptible a los comentarios negativos sobre su trabajo y en ciertas ocasiones puede ser un tanto volátil. No obstante, si este logra controlar sus emociones, solo puede contribuir a alcanzar el éxito.
Si alguna dificultad se presenta entre unos y otros (lo cual puede suceder al inicio) probablemente guarde relación con tendencias innovadoras y conservadoras. Por supuesto, será el hombre Cáncer quien siempre abogará por mantener aquello que ya sirve y que ha demostrado ser útil y seguro. Sagitario por su parte será arriesgada y propondrá nuevos caminos y alternativas. Tanto un factor como otro es útil en un ambiente laboral, la prudencia es tan buena consejera como la visión futura.