Isabella Garm | 05 Enero 2023
Piscis puede ser maquiavélico. manipulador y dominado por impulsos de pasión quimérica. Su personalidad le lleva a montar auténticos psicodramas y puede ser muy absorbente, rozando el abuso a nivel emocional. Astuto y exigente, es un campeón en el arte de la confusión y la mitomanía delirante. Cualquier excusa es buena para quejarse y lamentarse.
La claridad y la transparencia no son precisamente sus puntos fuertes. Piscis es una persona ambigua, que odia ver la realidad y tiende a refugiarse en su mundo interno, bastante alejado de la realidad. Para él es más fácil tomar carreteras secundarias que conducir en línea recta. Acostumbrado a nadar en aguas turbulentas, se deja arrastrar por la corriente, sin saber muy bien por qué, pues es indeciso y tímido, evasivo e irresponsable. Es muy poco realista y navega entre la confusión, el desánimo, el caos, la depresión y la tristeza.
Los defectos de piscis en el amor
Piscis es utópico y confuso. Este signo se ve a sí mismo como un romántico, pero es sumiso y dependiente. Incapaz de tomar la iniciativa, tiende a apoyarse toda su vida en su media naranja, esquivando los problemas reales.
Cuando está soltero, es un amante indeciso y perezoso, que se conforma con lloriquear mientras espera que se le acerquen. Entonces, ahoga a su presa bajo un diluvio de tópicos que le parecen poéticos.
Si forma una pareja estable, se trata de un compañero quejica y pegajoso, que está perpetuamente frustrado por sus deseos totalmente irreales y tiende a transmitir esta sensación a los demás.
Los defectos de piscis en la amistad
Piscis es esquivo, ingenuo, indeciso y descuidado. Es un amigo al que te costará trabajo encontrar cuando necesites ayuda. Su indiferencia es contagiosa y su naturaleza desordenada siembra el caos a su paso.
Como amigo, se trata de una persona despreocupada, que tiene los bolsillos llenos y se deleita en un mundo imaginario que no sirve para nada. Llora con facilidad porque le encanta ser consolado.
En las salidas, es preciso vigilarle constantemente, porque se siente muy atraído por paraísos artificiales en los que ve la vida y a las personas desde un ángulo más agradable. Hay que distraerlo y mantenerlo ocupado toda la noche para evitar que se convierta en un borracho fracasado.
Si eres Piscis y no te reconoces al 100%, no te decepciones. Puedes consultar tu perfil ascendente para completar tu retrato.
Los defectos de piscis en la convivencia
Piscis es dedicado pero inconstante, perezoso y desorganizado. Es un idealista, capaz de hacer sacrificios insensatos con tal de salvar una causa nebulosa. No es un compañero fiable y no deberías pedirle consejo, aunque él crea que su instinto es infalible.
En las relaciones sentimentales, Piscis se funde con su pareja y pierde toda su personalidad. Tiene exigencias suaves y repetitivas, más allá de las realidades del amor cotidiano. Es agotador por su dependencia, y ahoga a su compañero en lugar de levantarlo.
En la familia, el padre Piscis desestabiliza a su hijo con sus inusuales métodos de comunicación. Normalmente, todo se queda en lo "tácito" y el niño necesita reglas más concretas, con lógica y estructura.
El niño Piscis es hipersensible, impresionable y muy imaginativo, hasta el punto de embellecer la realidad. Miente para complacer. Es un niño perezoso, que siempre conoce a alguien que hace las cosas mejor que él.
Los defectos de piscis en el trabajo
Piscis es descuidado, crédulo, ilógico e imprevisible. Se somete a la jerarquía por pereza, porque le resulta más fácil. Cuando no está de acuerdo con algo, en lugar de afrontar las cosas de frente, da bandazos, hace insinuaciones o esquiva la respuesta. Es muy hábil a la hora de mimetizarse con el entorno y fundirse con él, sin ruido, pero con gran eficacia.
Su naturaleza caótica afecta irremediablemente a sus vecinos. Carece de ambición y se distrae con conversaciones u ocupaciones secundarias, en una desorganización crónica.
Como jefe es escurridizo, delega sus responsabilidades en los más abnegados e intenta trabajar lo menos posible, con toda discreción. Carece de talento para estructurar un equipo y le falta sentido práctico.
Si trabaja como autónomo, se arruinará si no tiene la ayuda de un contable y también le vendría bien la de un enfermero y un psicólogo. Es desorganizado e ingenuo, fácil de engañar.
En resumen, Piscis es una persona negligente, utópica y confusa. Lo peor es su carácter evasivo. Siempre encuentra a alguien que hace las cosas mejor que él y se las arregla para delegárselas.
El mejor consejo que podemos darte si eres Piscis es que estimules tu maravillosa imaginación, ya que al combinarse con tu intuición, te confiere una inmensa creatividad y te aporta un encanto fascinante. Tu desinterés y compasión por los más débiles te convierten en una persona filantrópica y caritativa.
Sin embargo, el exceso de imaginación te aleja de la vida real. Tu credulidad, confusión y utopías alimentan tu tendencia a la pereza y haces gala de una dependencia tan despreocupada como sumisa.