Isabella Garm | 02 Noviembre 2022
Los símbolos astrológicos siempre han estado ligados a la cultura popular, a algunos acontecimientos históricos, al ámbito religioso, etc. El sol es uno de los astros simbólicos por excelencia. Por eso vale la pena lucirlo en un tatuaje con mucho estilo para que siempre veas un nuevo amanecer. El sol naciente es un emblema en muchas culturas del mundo ya que siempre está presente en cada rincón del planeta. Es símbolo de renovación del comienzo de una nueva etapa, de una nueva vida. Plasmado en tu cuerpo te recordará que el sol siempre sale de nuevo y la vida sigue su curso.
¿Cuál es el significado de estos diseños?
El sol naciente es el primero que vemos salir después de que se va luna. Es lo primero que nos ilumina y nos indica que ha comenzado un nuevo día para seguir con nuestra vida.
En la cultura japonesa, el sol naciente tiene un gran valor histórico, debido a que fue el símbolo de la bandera de Japón durante el período Edo hasta 1945, año en que el país fue vencido en la Segunda Guerra Mundial. Luego el sol rojo con rayos se sustituyó por uno sin rayos, pero conservando el color rojo y el blanco del fondo, en señal del renacimiento de la nación.
Si sientes que algo va a cambiar en tu vida y vas a comenzar un nuevo destino, con este diseño lo podrás demostrar claramente.
¿Cómo combinar estos tattoos?
El sol naciente es un diseño que se ve muy bien en una parte amplia del cuerpo para un estilo tribal.
Si elegiste el sol naciente japonés, se verá muy bien en tu espalda o en tu omóplato. Puedes tatuártelo a color o en tinta negra.
Otra idea genial es tatuarte una foto panorámica del sol naciente imponiéndose en el horizonte. Este diseño lucirá muy bien en el hombro o en la espalda. Puedes complementarlo con frases emotivas y añadirle detalles como un paisaje o el mar bajo tu sol naciente.
Si lo quieres en tamaño miniatura en la mano, puedes tatuarte una figura sencilla de un sol naciente en blanco y negro.
El sol naciente es un elemento muy significativo en la vida diaria. Siempre que terminamos una etapa de nuestra vida, nace una nueva. El sol naciente hace alusión a estos nuevos comienzos que vamos experimentando. Nuestra piel es el mejor lienzo para expresar ese nuevo comienzo y mostrarlo al mundo.
