Isabella Garm | 17 Junio 2023
En algún punto de la vida hemos tenido que enfrentar la experiencia de la muerte de un ser querido. Todas las culturas tienen sus ritos y tradiciones en torno a este evento. Una que se ha hecho muy conocida alrededor del mundo es el Día de los Muertos mexicano.
Se cree que esta tradición tiene su origen en los grupos prehispánicos de América Central, como los mayas o los mexicas. Con la llegada de los españoles, estas fiestas se sincretizaron con las fechas católicas del Día de los Fieles Difuntos y el Día de Todos los Santos.
El Día de los Muertos fue reconocido como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad en 2008. Los mexicanos que celebran esta festividad creen que sus muertos los visitan durante estos días. Por ello se preparan mesas con sus comidas y bebidas favoritas, así como el pan de muerto. Además se decora con velas, cruces, flores, fotos y las Calaveritas de azúcar.
Las Calaveritas o sugar skulls son sin duda uno de los símbolos más reconocidos del Día de los Muertos. Ellas junto a las catrinas también llamadas Señora Muerte o Santa Muerte son los motivos más populares para realizar un tatuaje.
Diseños más tatuados dentro de este estilo
La base de las Calaveritas es un cráneo, el cual se adorna con diversos elementos como son cruces, flores, corazones, telarañas, estrellas y figuras geométricas. Así que es un diseño muy personalizable, en el cual puedes elegir los detalles que estarán presentes en la Calaverita, así como los colores a emplear.
Esta estética, aunque diversa, es icónica y muy fácil de reconocer y por lo tanto es sencillo adaptarla a otras imágenes. Es común incorporala a animales como gatos, perros, búhos o la clásica golondrina del estilo tradicional. De igual manera tu tatuaje puede representar a un personaje animado, histórico o de la cultura popular con este estilo. Hay piezas que muestran a mariachis, Hello Kitty, Batman, princesas de Disney, Elvis Presley o Stormtroopers de la Guerra de las Galaxias.
Algunos tatuajes basados en catrinas la presentan en su forma original, es decir un esqueleto de mujer con sombrero, flores, velo y una larga sonrisa. Pero también es habitual crear diseños más similares a un retrato femenino con estos detalles. Estas piezas tienen una belleza y sensualidad única que los hace muy llamativos. Típicamente se realizan en realismo en blanco y negro, pero algunos se tatúan a full color, en el estilo tradicional o neotradicional, siendo en cualquier caso los resultados igual de impactantes.
Con tu próximo tatuaje, celebra la vida recordando aquellos que se han ido.
