En el arte, hay espacio para todas las posibilidades.
Considerado el arte más revolucionario de la historia, el Cubismo, es un movimiento artístico que tuvo a Pablo Picasso como su máximo exponente. Vivió su época de gloria a principios del siglo XX. Como tendencia artística, fue esencial para dar pie a las demás corrientes vanguardistas europeas. Buscaban romper en lo absoluto con todo vestigio de la norma clásica. Transformando la profundidad, la perspectiva y la descripción de la naturaleza dentro de la composición.
Este estilo se desarrolló en dos fases. El Cubismo Analítico, buscaba representar en figuras geométricas, cuerpos complejos en versiones simplificadas por medio de masas fragmentadas. La forma, la perspectiva, el movimiento y el espacio eran los protagonistas. Se trataba de un arte mental, desligado de la interpretación o semejanza a la naturaleza.
Luego, tenemos el Cubismo Sintético, en donde la representación de la composición bidimensional primaba sobre las figuras con volumen. Es decir ya no se centraba en el análisis detallado de sus formas, sino en captar la esencia de su fisonomía. Resaltando los colores, las formas predominantes y las partes más significativas de la figura.
Ideas de tatuajes inspirados en las obras de Picasso
Si tu deseo es realizar un tatuaje para rendir homenaje al artista hay muchas opciones. Este arte rompe drásticamente con los modelos estéticos que sólo valoran la forma y su perfección. Entre sus características principales encontramos que este estilo promueve la fragmentación, la descomposición de los planos y de las perspectivas. Está representativamente marcado por el uso de figuras de la naturaleza o los paisajes en formas geométricas, dando como resultado una figura en tres dimensiones.
Es un arte donde no existe el compromiso de utilizar la apariencia real de las cosas.
Sin duda alguna la pieza artística de Picasso más representada en tatuaje es el Guernica. Este mural de 1937 está inspirado por el bombardeo que sufrió dicha población, durante la guerra civil española. Es una obra impactante y los tatuajes le hacen justicia. Este diseño se puede plasmar en diversos tamaños oscilando entre medianos a extra grandes. Siendo los sitios mas populares para hacerlos los brazos y espalda. Predomina el estilo blanco y negro o elaborados en una gama de tonalidades del mismo color.
Otras obras que sirven de inspiración son diseños sencillos, de trazos limpios en negro como; la Cabeza de Toro 1942, Don Quijote 1955, el Sueño 1932 y el Autorretrato 1955. Por el contrario si tú inspiración va hacia el color Mujer ante el espejo 1932, La Mujer que llora 1937 o La lectura 1932, serían tus principales opciones, pero en definitiva no las únicas.
En la actualidad se intenta revivir la magia de este estilo artístico utilizando la piel como lienzo. Algunos tatuadores se inspiran en la obra de Picasso, adaptando a la perfección imágenes ordinarias como rostros, paisajes y motivos vegetales, dándoles un toque moderno a una de las corrientes artísticas más revolucionarias de la historia de la humanidad.