Capricornio no es tan angelical como parece a primera vista. Insensible y traicionero, cultiva el gusto por el disimulo y la astucia. Es capaz de pasar mucho tiempo planificando sus pasos y cuando comienza a desarrollar sus proyectos, lo hace de manera autoritaria. Sin embargo, no es bueno afrontando imprevistos, porque le falta imaginación y fantasía. Es silencioso como una tumba y tiende a llevar una vida demasiado sobria. Presta mucha atención a su aspecto físico y, a medida que va madurando, se convierte en un viejo gruñón.
En el trabajo, se enfrenta sin miramientos a cualquiera que se atreva a ocupar su lugar. Es un advenedizo que sólo piensa en su carrera. Poseedor de una gran ambición, para lograr sus objetivos no duda en aplastar a los posibles competidores que se encuentra en su camino. Bajo su apariencia tranquila, se oculta un individuo de sangre fría, aburrido y calculador, que puede convertirse en una auténtica piedra en el zapato de sus compañeros.
Los defectos de capricornio en el amor
Capricornio es pesimista y tacaño. Tiene grandes dificultades para expresar sus sentimientos y hay que ser muy paciente y tolerante para soportar sus silencios y su temperamento. Es un pesimista, un envidioso que no confía en nada y en nadie.
Cuando está soltero, es un amante tacaño que no tendrá detalles con sus parejas sin analizarlo bien primero. No hace las cosas por hacerlas. Su humor, muy personal, puede resultar vejatorio y su aspecto rígido no invita a la relajación.
Como pareja, es un compañero severo y convencional. Cree que una vez que encuentra a su media naranja ya no necesita hacer nada más. Por ello, se limita a mantener su relación y su romanticismo se derrite como la nieve al sol. Es el rey de la vida rutinaria.
Los defectos de capricornio en la amistad
Capricornio es resignado, tacaño, terco y pesimista. Es un amigo silencioso, poco demostrativo y muy exigente. Además, tiene pocos amigos porque sus criterios de selección son especialmente severos.
Con sus amistades de larga duración es una persona sombría. A menudo es necesario levantarle el ánimo y apenas se puede contar con él cuando está triste. Ennegrecerá aún más la situación y puede llegar a resultar desesperante.
Cuando sale, Capricornio se muestra vacilante a primera hora de la tarde. Cuando se relaja se convierte en una persona jovial, pero puede lanzar flechas afiladas a sus acompañantes, arruinando la salida por completo. Por eso, la gente duda en invitarle, sobre todo cuando se busca pasar una noche divertida.
Si eres Capricornio y no te reconoces al 100%, no te decepciones. Puedes consultar tu perfil ascendente para completar tu retrato.
Los defectos de capricornio en la convivencia
Capricornio se ve a sí mismo como una persona seria, pero es conservador, frustrado y gruñón. No soporta el desorden y se rebela cuando se enfrenta a una administración calamitosa. No entiende que nadie pueda hacer las cosas sin tener en cuenta el sentido común. Por ello, opone una resistencia obstinada, que no se relaja hasta que todos han cumplido con sus tareas.
Con su pareja, Capricornio suele estar triste o abatido. Es una persona desconfiada y su media naranja necesita tener paciencia para dos.
En familia, el padre Capricornio es considerado frío y severo. Afronta sus responsabilidades sin desviarse, pero exige a sus hijos una rectitud moral infalible, así como un gran respeto por las tradiciones familiares que él establece.
El niño Capricornio parece haber nacido viejo. No disfruta de la compañía de otros niños y es feliz en compañía de adultos. Su fría reserva le impide a menudo ser cortés y se deprime con facilidad.
Los defectos de capricornio en el trabajo
Capricornio es una persona frustrada, arribista, despiadado y dura. El capricorniano no supondrá un problema para sus superiores, siempre que se le permite trabajar a su manera, con instrucciones claras y estables. No le gusta el desorden ni la improvisación, porque no es muy flexible.
Como compañero, es moralista y le cuesta adaptarse a los métodos, códigos y objetivos específicos del trabajo en equipo. Aspira a ganarse la estima de sus superiores y esto hace que no puedas confiar mucho en él.
Como jefe muestra una actitud paternalista. Está convencido de ser un ejemplo de sacrificio y una poderosa motivación para sus subordinados, cuando en realidad, la gente le teme.
Si trabaja como autónomo, es una persona pesimista que arrastra sus actividades rutinarias, consumiéndose en la frustración y aislándose en una torre de marfil inaccesible. No es un buen vendedor.
En resumen, Capricornio es una persona tacaña, testaruda y negativa. Lo peor es su excesivo pesimismo. Es capaz de destruir los sueños más hermosos con dos réplicas contundentes.
El mejor consejo que podemos darte si eres Capricornio es que conserves tu prudencia y sigas siendo ambicioso y paciente, ya que estas son tus mejores bazas. Tu rigor realista, alimentado por un toque de humor corrosivo, contribuye mucho a tu encanto. Eres una persona con la que se puede contar en cualquier circunstancia.
Sin embargo, tu sobriedad puede convertirse en resignación derrotista, tu sentido del ahorro puede hacer que seas demasiado avaro o tacaño y tu determinación llega a convertirse en convenciones tan rígidas como impopulares!